Los guisantes plantados hace un par de meses comienzan a dar señales de madurez, han empezado a florecer. Todavía tardarán en dar fruto pero aunque ralentizada en invierno la vida de nuestro huerto sigue adelante.
Conviene darles soporte adecuado para que puedan trepar a través de tutores y mediante cordones enlazados o con algún tipo de malla.
El año pasado tuvimos una cosecha bastante abundante de guisantes, de hecho fueron nuestro cultivo estrella de la temporada. Un consejo, hay que tener paciencia y dejar que la vaina y los frutos que tiene dentro maduren lo suficiente para que estos sean de un calibre aceptable, de lo contrario tendremos aparentemente unas vainas lustrosas pero vacías.
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