Nuestras amigas las abejas

Para poder lograr una buena cosecha en muchos de nuestros cultivos necesitaremos que se realice una polinización de las flores, otras en cambio se autopolinizan.

Para la polinización (que no es otra cosa que la fecundacion de las flores que permite la producción de semillas y frutos), las plantas utilizan diferentes medios como agentes físicos (el viento o el agua) o por medio de un polinizador animal (insectos). En ausencia de estos medios puede hacerse manualmente por el hombre pero es un trabajo un tanto laborioso.

Este año han frecuentado nuestra terraza nuestras queridas amigas las abejas, las cuales lejos de los miedos que puedan provocar, nos proporcionan multitud de beneficios y entre ellos el realizar la polinización de las flores, de hecho son el polinizador animal más importante. Debe haber un enjambre cercano y nos visitan regularmente, sin causar ninguna molestia. Toman el néctar que necesitan y se marchan.

Sería una grave tragedia para la agricultura el que desparezcan, de hecho en algunos lugares han menguado en su número por plagas, enfermedades y agentes químicos, y las consecuencia para las cosechas no han tardado en aparecer. Además son un buen indicador de la contaminación medioambiental.




Abeja en plena faena